El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, calificó ayer de «vergonzosa» la morosidad de las administraciones públicas tras conocer que el Gobierno de Canarias tarda una media de 184 días para abonar las facturas de sus proveedores «mientras a un autónomo se le penaliza con un recargo del 20% por retrasarse un solo día».

En el marco de la firma de un convenio con la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Amor advirtió además que, de continuar esta profunda recesión económica, «el Estado va a tener que salir al rescate de los autónomos».

En este contexto, recalcó que, «tan solo en el Archipiélago, tres trabajadores por cuenta propia se ven obligados diariamente a cesar en su actividad».

El acto contó también con la participación del presidente de la Cámara de Comercio, Ignacio González Martín, y el representante de ATA en las Islas, Juan Carlos Arricivita Bello.

Entre los principales puntos de este acuerdo se encuentra el fomento de la emprendeduría, la formación e innovación, así como el impulso de una plataforma servicios, CamerAhorro, que permitirá importantes descuentos en los gastos fijos de los autónomos como son la luz, el combustible, la telefonía o el transportes, entre otros.

Según resaltó Ignacio Martín, «este convenio va dirigido a intensificar los servicios que se presta a un colectivo importante que, en Canarias, aglutina a más de 105.000 autónomos, pero que va desinflándose «a pasos agigantados» por la gravedad de la crisis.

Mientras, Arricivita llamó la atención sobre los estragos que la morosidad pública y privada estaba provocando sobre la estructura productiva de Canarias. A su juicio, «para mantener el empleo, hay que pagar y es inconcebible que el Ejecutivo autónomo y otras administraciones estén tardando una media de seis meses para abonar las facturas de sus proveedores».

En este sentido, justificó su posición a favor de la petición del rescate del Gobierno de Canarias porque «aunque llega tarde, es absolutamente necesario para aliviar la pesada carga de muchas empresas, con las que la Administración autonómica ha incumplido flagrantemente el pago de sus servicios».

Por su parte, el presidente nacional de ATA subrayó que «hoy, los tres millones de autónomos de este país levantan las persianas de su negocio con la idea solo de sobrevivir. No vendemos, no producimos, no tenemos crédito, padecemos una insoportable y vergonzosa morosidad y estamos acosados por unos impuestos diseñados para otra realidad económica, muy diferente de la actual».

Noticia procedente de Eldia.es