coworkDicen que la crisis agudiza el ingenio y, por algunas formas de trabajo que florecen con ella, también la eficiencia, el ahorro y la coordinación entre profesionales de muy diversos ámbitos, en la mayoría de los casos autónomos, que optan por compartir espacios donde desarrollar sus actividades.

Aunque por razones obvias Madrid y Barcelona están a la cabeza nacional en el número de los denominados espacios de «coworking» (trabajo compartido), algunas ciudades medias como Granada han visto nacer en los últimos meses interesantes iniciativas que vienen a ampliar una oferta disponible que no ha parado de crecer en España.

Es el caso de «erranT espacio cowork», el último centro de estas características que ha abierto sus puertas hace muy pocos días en pleno centro de la capital granadina y que centra su foco esencial de especialización en el periodismo, la comunicación audiovisual, el diseño gráfico y web y la ilustración.

Convertidos en gestores de un espacio de estas características, los cuatro socios de «erranT» -agrupados como cooperativa de trabajo y que antes estaban en desempleo- se consideran ante todo también «coworkers», ha explicado a Efe José Antonio Barrionuevo, uno de los integrantes, quienes creen que el lugar en sí quizá sea «lo menos importante» frente a la comunidad que pretenden fomentar.

El «coworking» se presenta además como una respuesta a la situación actual, en la que gente con menos medios necesita fórmulas más económicas para trabajar, ha señalado Barrionuevo, quien opina que ante el «boom» de este tipo de espacios sólo lograrán mantenerse aquellos que realmente consigan «crear comunidad» y sinergias.

La formalización de la inscripción y el abono de una cuota ajustada al uso que se le dé al espacio da acceso al socio a un área de trabajo compartida, con conexión a internet de alta velocidad, una sala de reuniones, un aula, un espacio multifuncional y una zona de descanso donde tomar un café, charlar o simplemente relajarse.

Negocios como este se suman a otros surgidos en los últimos meses en la ciudad y conforman ya un auténtico fenómeno al que no sólo está respondiendo la iniciativa privada, sino que también ha despertado el interés de la administración pública.

De hecho, el Ayuntamiento de Granada prevé tener finalizado para el próximo verano las obras del nuevo Centro Municipal de Coworking, ubicado en el popular barrio de La Chana y que, en sus más de 800 metros cuadrados de superficie, estará dotado de la tecnología y los recursos necesarios para que los emprendedores desarrollen sus proyectos e ideas empresariales.

Esta iniciativa es fruto de un convenio urbanístico entre el Consistorio y la Universidad de Granada, por el que la administración local pone a disposición los terrenos y la institución académica construye un complejo para empresas de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).

La propia patronal granadina también ha registrado un repunte en este tipo de experiencias profesionales y, como ha señalado a Efe María Vera, técnico de la Unidad de Creación de Empresas de la Confederación de Empresarios, en los últimos meses han notado un aumento del interés de los nuevos empresarios por instalarse en un espacio de «coworking».

Conscientes de que es la mejor manera de ahorrar costes y ganar en sinergias profesionales a las que no podrían acceder desde una oficina individual, muchos de los emprendedores que pasan por la Unidad de Creación de Empresas han preguntado por las ventajas, las condiciones y las posibilidades que ofrecen estos espacios.

Sobre el perfil de los emprendedores que se interesan por los «coworking», ha explicado, se trata en su mayoría de jóvenes empresarios, principalmente autónomos, que están pensando en montar su primer negocio y buscan una manera de tener una sede física de su empresa sin tener que pagar gastos fijos elevados.

Noticia procedente de ABC.es