Si se inventaron los puentes fue para unir dos orillas, como en este caso, dos municipios que hasta hace bien poco siempre estuvieron comunicados entre si: ARONA Y ADEJE
Por el capricho bien interesado del alcalde de Adeje, los dos pueblos, en éste caso dos zonas turísticas siempre unidas como Playa de las Américas, las separó y se inventó el nombre de “Costa Adeje” para diferenciarla de su hermana al tener mala prensa, siempre despreció la mala propaganda de las Verónicas, pero el intento le salió mal porque su municipio ha quedado atrás al querer a toda costa promocionar la zona del Duque, abandonando lo que era la fuente de ingresos y que mantenían a buena parte de Tenerife.
Los caprichos de éste mandatario han llevado al hundimiento de toda la zona sin tener en cuenta la cantidad de familias que ha llevado a la ruina económica y más aún estando en una crisis económica mundial.
No se puede promocionar un destino como zona VIP cuando los alrededores están siempre abandonados en materia de limpieza, seguridad o en obras, el turista, se lleva la imagen global, no la de un hotel determinado.
Como consecuencia, la sensación que querían transmitir de un Costa Adeje de lujo, ha quedado reducida a un espacio muy pequeño y bien delimitado, la zona del Duque, el resto, a derecha e izquierda, a fuerza del olvido, abandono y desprecio lo ha dejado de forma indescriptible. En resumen, está todo de un estado caótico y sin vías de recuperación.
Se está invirtiendo en la remodelación de calles, que después se dejan abandonadas con la excusa de que las obras no están terminadas o entregadas, pero no se aplica ninguna normativa en lo que se refiere a cerramientos, mobiliario de terrazas, toldos, publicidad, seguridad, relaciones públicas, actividades ilegales …… Todo ello lleva una imagen tercermundista, primero se crean zonas peatonales y después se piensa en los aparcamientos, que como no, al ser privados, la hora se paga muy cara y más aún si uno pretende pasar el día.
Causa vergüenza que los videos publicitarios de Costa Adeje, solo muestren el mar y alguna terraza y jardín pertenecientes a algún hotel de lujo, ello da a demostrar que el resto no está como para invitar a los posibles turistas a visitar nuestro “paraíso Perdido”, y usted, solo usted, es el causante y responsable de tal pérdida.