dinerCasi dos millones de personas. El número no es ni mucho menos despreciable y más aún cuando se habla de que, a la postre, pueden ser potenciales clientes de los bancos. Según los últimos registros del boletín de estadísticas laborales del ministerio de Empleo y Seguridad Social, el número de autónomos en España se acerca a esta cifra. En otras palabras, nuestro país es el sexto que más trabajadores por cuenta propia tiene en la Unión Europea, por detrás de algunos como Reino Unido, Polonia o Alemania.

Las entidades bancarias son conscientes del importante segmento de potenciales clientes que tienen en estos trabajadores y buena parte de ellas cuenta en sus catálogos comerciales con una línea de productos bancarios orientados hacia ellos. Desde una de las principales entidades españolas, que insiste en mantener el anonimato, reconocen que “aunque éramos reacios a comercializar estos productos nos hemos tenido que rendir ante la evidencia. En los últimos tres años nuestros clientes autónomos han ido creciendo en una media de más del 20% anual y nuestras estimaciones son que, en el actual panorama laboral, se incremente todavía más en los próximos años”.

Actualmente, son varias las entidades que apuestan por hacerse un hueco en el sector ofreciendo tres clases de productos bancarios. El primero y más común son cuentas para autónomos, que suelen estar exentas de comisiones, ofrecen la posibilidad de incurrir en descubiertos durante un breve periodo de tiempo o conceden el envío de transferencias gratuitas. Por su parte, las entidades también comercializan tarjetas de crédito con condiciones especiales y ofrecen créditos con condiciones ventajosas para estos clientes. En general, estos productos ofrecen condiciones algo más ventajosas que las que reciben los clientes que domicilian sus nóminas.

ING Direct ha sido una de las entidades más activas en este segmento en los últimos años y es una de las mejor posicionadas. Ofrece la cuenta Negocios para autónomos y microempresas, con la que se pueden realizar todos los pagos mediante transferencias o emitir fácilmente remesas de recibos. A ello hay que añadir que las operaciones más habituales, como el mantenimiento de la cuenta, transferencias nacionales y a la UE o el pago de nóminas, no tienen ningún coste. Esta cuenta también puede tener asociada la cuenta de ahorro Negocios, con una rentabilidad del 1% TAE y ofrece a sus clientes contratar servicios de TPV (datáfonos para pagos con tarjeta de crédito).

ING no es la única entidad en acercarse a autónomos y pymes. Banco Santander ofrece cuatro cuentas con condiciones especiales para empresas. Entre ellas destaca la Cuenta Bienvenida Empresas con una única comisión por administración y mantenimiento, independientemente del número de apuntes realizados. En el caso de la Supercuenta Global Empresas, da liquidez inmediata mediante cheques y tarjetas con posibilidad de descubiertos, la instalación gratuita de un TPV y la opción de adquirir un vehículo renting con condiciones especiales.

Por su parte, BBVA enmarca las cuentas de los clientes Autónomos en el programa Adiós Comisiones, que está exento de cargos por administración y mantenimiento, por ingreso y emisión de cheques o por transferencias. La entidad ofrece la cuenta Compromiso Pymes a aquellos clientes que domicilien dos recibos mensuales y gestiona a través de ella los pagos a la seguridad social. Bankinter es otro de los bancos que ofrece cuentas a pequeñas empresas y trabajadores por cuenta propia. La cuenta Profesional, cuyas comisiones deben ser pactadas de forma personalizada a pie de ventanilla, ofrece la posibilidad de descubiertos automáticos de hasta 600 euros.

Tarjetas con condiciones ventajosas

Las cuentas especiales para autónomos tienen asociadas tarjetas de crédito, tal y como sucede con el resto de productos bancarios de este tipo. Las diferencias apenas son significativas respecto a una tarjeta normal, aunque suelen incluir servicios de control de gasto y asistencia legal o fiscal. Los servicios de cobertura de descubiertos también suelen ser habituales para un periodo de tiempo de varios días.

En el caso de querer realizar compras a crédito, los tipos de interés oscilan entre el 20% TAE que ofrece Bankinter, el 22% TAE de ING y el 24% TAE de Santander o BBVA.

Concesión de créditos

Es una de las cuestiones más repetidas día tras días. ¿Cuándo volverá a fluir el crédito hacia las pequeñas y medianas empresas? Según los últimos datos del informe de la troika sobre la tercera evaluación del rescate bancario español, en 2014 tocará fondo la contracción del crédito y crecerá en 2015 para llegar a las familias y las empresas. En los últimos meses se han visto progresivos avances en este sentido en algunas entidades. Por ejemplo, a principios del mes de julio BBVA anunció un acuerdo con la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos por el que ofrece facilidades de financiación a este colectivo de más de medio millón de personas.

Desde Santander y BBVA cuentan con distintos productos en los que se ofrece financiación para cubrir las necesidades del circulante, gestión de líneas ICO para empresas y emprendedores y financiación a medio y largo plazo. Las condiciones de cualquier préstamo dependen de la vinculación del cliente, el importe y los plazos de amortización pero, para un préstamo tipo de 50.000 euros a devolver en cinco años, oscila entre el 11% y el 14% TAE en ambas entidades.

En el caso de ING Direct, ofrece una línea de crédito a un tipo del 11,15% sin comisiones de disponibilidad, de estudio de viabilidad o de cancelación anticipada y un cargo del 2% por apertura y renovación. A la entidad holandesa se suma Banco Popular, que cuenta con líneas de financiación flexible para sus negocios y unos tipos de interés que, en todos los casos, están por encima del 13%.

Sin embargo, la realidad es que no siempre los bancos se muestran dispuestos a abrir el puño y es en este punto donde entran en juego otras entidades de crédito, que suplen en muchos casos a estas entidades. Firmas como Cofidis, Credit Services o Gedesco cuentan con productos enfocados a los autónomos, pero el coste de no obtener financiación a través de los bancos tradicionales suele salir caro. En concreto, de los casos consultados para el crédito tipo anteriormente mencionado, los intereses oscilan entre el 18% y 23% TAE.

Noticia procedente de el confidencial.com